Hace un tiempo en un viaje last minute a EEUU tuve la oportunidad de conocer New Orleans, una ciudad que me sorprendió y cautivó desde el momento que llegué.  La calidez y la onda relajada de su gente, las influencias españolas y francesas, la comida creole, la música y la arquitectura fueron las cosas que más me llamaron la atención dado que nunca había conocido otra ciudad de EEUU que se le pareciera

Llegué a New Orleans para unirme a los amigos de Decidilo.com que me invitaron a acompañarlos en el último tramo de su viaje por USA. Fueron 48hs recorriendo el centro de la ciudad, sus pantanos y dejándome sorprender con su arquitectura y sus comidas típicas.

Del aeropuerto al centro de New Orleans

Salí del aeropuerto hacia el centro de la ciudad a bordo del Airport Shuttle (USD24 ida) que hace el trayecto en poco menos de 50 minutos y el chofer muy buena onda nos iba relatando datos interesantes sobre los lugares que vamos pasando. Así es que cuando pasábamos por un par de cementerios nos contó que el 80% de la ciudad se encuentra por debajo del nivel del mar, esto hace que los suelos se saturen de agua muy rápido y por eso no entierran a la gente sino que las tumbas se construyen para arriba tipo panteones.

El shuttle para en la puerta de los hoteles pero yo me bajé donde comienza Canal St en el Río Mississippi. Allí hay un outlet, un par de hoteles y hasta un enorme casino. Pero solo queria ver el río y uno de esos caracteristicos barcos a vapor que estaban dibujados en mi libro de Las aventuras de Tom Sawyer, que leía de chico y que finalmente pude conocer! Así comenzaba mi recorrida por New Orleans.

El French Quarter

Y comencé a caminar por Canal St, que es una arteria principal por donde corren los tranvías y que funciona como división de lo que es la parte antigua y la parte más moderna. Al cruzar las caller Chartres, Royal y llegar a Bourbon ya estaba llegando al corazón del French Quarter. Un barrio donde convive lo historico y lo bizarro, con sus bares, sus casas y hoteles coloniales con balcones a la calle, donde la gente se asoma a ver pasar el mundo, y mucho alcohol, mucho jazz y un desfile de los personajes más extraños.

New Orleans no tiene restricciones (salvo de edad) en cuanto a la venta de alcohol, se vende las 24hs y no hace falta una bolsa para cubrir el envase. Y en el French Quarter se puede ir caminando por la calle con un vaso (de plástico) de cualquier bebida alcohólica a cualquier hora del día. Al mediodía no hay mucho movimiento de turistas, pero sí se puede ver como algunos bares comienzan a abrir y se puede escuchar como las bandas ensayan para tocar a la noche.

Bourbon St. es famosa por su cantidad de bares y donde todos los días a las 6PM se convierte en peatonal. Personajes bizarros circulan por las calles, muchos andan con sus mascaras de carnaval en cualquier epoca del año, vuelan collares por los aires para que alguna de las chicas habitues del lugar lo agarre y muestre sus tetas, y como si todo esto fuera poco, andaba yo con mi mascara de Chewbacca y que insólitamente me paraban para sacarse fotos 😛

Además de sus famosos bares, en el French Quarter podemos encontrar tiendas de souvenir, galerías de arte y restaurantes donde poder saborear platos tradicionales de la cocina creole. Así como Philadelphia tiene sus cheesestakes sandwiches, aquí en New Orleans encontramos los famosos Po’boys,que son unoa sandwiches de baguette No perdí tiempo y fuí directo a pedir uno de camarones, estaba espectacular.

Otro clásico son los beignetes de Café du Monde, son nada mas y nada menos que buñuelos, igualitos a los que hacía mi vieja cuando era chico (y me caían igual de pesados) Pero en cambio los Pralines fue algo que nunca había oído hablar y son riquísimos. Vale la aclaración que no tiene nada que ver con el praliné de las tortas, el “Prahlin” es una especie de dulce de leche solido en forma de disco y con castañas de cajú adentro. Son una bomba de dulce que si te empalagas fácilmente no pass más de uno, pero es muy rico.

Los condimentos tambien merecen ser mencionados ya que están presentes en todos los platos creole.  La famosa Salsa Tabasco es justamente de New Orleans y se usa en casi todo

A unas cuadras de allí se encuentra Jackson Square, un hito histórico nacional ya que en 1803 se realizó allí la compra del territorio de Louisiana a Francia y se incorporó al territorio nacional de Estados Unidos. Allí también se encuentra la catedral de St Louis, la más grande de la iglesia católica en USA.

Los Pantanos

En las afueras de New Orleans también tenemos atracciones para visitar, entre ellas navegar por los pantanos, que es sin dudas una de las más divertidas aunque no apta para miedosos.

La mayoría de los pantanos se encuentran a unos 40 minutos en auto del centro, generalmente se puede hacer en medio dia. Algunos se combinan con la visita a alguna Plantation House que son mansiones donde vivian los dueños de las plantaciones de caña de azucar o algodón. Se navega en una embarcación grande por los bayous y entre medio de los cocodrilos. Fundamental no sacar los brazos afuera de la baranda ya que son muy pillos los cocodrilos.

Acá pude transmitir en vivo por Periscope desde cerca de los cocodrilos (usé un  chip de HolaSIM que anduvo de 10!)

De regreso a la ciudad uno puede seguir caminando por el French Quarter en dirección hacia el río y  pasar a tomarse un buen trago en Latitud 29 de Beechbum Berry, la autoridad en lo que se refiere a tragos tiki.

Y una visita a New Orleans está incompleta si uno no se sube a un tranvía para hacer aunque sea unas cuadras. Son coches antiguos pero bien mantenidos y el boleto es muy barato, USD 1.25 y se paga con cambio arriba. Muy recomendada tomarse la linea St. Charles y hacerla hasta el final, pasando por el Garden District donde se pueden ver algunos antiguos caserones y mansiones.

New Orleans supo cautivarme como pocas ciudades de EEUU, definitivamente es un destino al que volveré porque 48hs definitivamente no me alcanzaron.

Mr Filangie

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